La frontera está ruda 🇨🇴

Sabes que estuve hablando con la prima Yokonda, ¿te acuerdas de ella? La que vivía en San Cristóbal. Bueno, se fue a Colombia, tal como está haciendo un gentío a pedir asilo.

¿Qué fue Patillero, todo bien?

Sabes que estuve hablando con la prima Yokonda, ¿te acuerdas de ella? La que vivía en San Cristóbal. Bueno, se fue a Colombia, tal como está haciendo un gentío a pedir asilo.

Ella me cuenta que la situación en la frontera está ruda, que el intercambio comercial ha caído muchísimo. Además, siguen activos los grupos de sicarios y encima dicen que la guerrilla penetra en poblaciones venezolanas para operar desde aquí.

Como siempre hay un vivo que “pesca en revuelto”, en Puerto La Cruz agarraron a unos tipos dedicados al tráfico de migrantes para explotación sexual. Es que siempre hay alguien que se aprovecha de las necesidades de otros. ¡Qué lamentable!

Es que bueno hay gente mamada por pasar tantas horas a oscuras. Pero imagínate tú si la luz falla hasta en los campos petroleros, que quedará para nosotros. Mientras tanto, las irregularidades con la gasolina van cobrando fuerza otra vez: este bochinche se arregla unos días y después vuelve.

La incertidumbre que reina en el país le puso freno a la economía y la cosa está restringida, algunos siguen haciendo esfuerzos para recuperar nuestro aparato productivo, pero no hay estabilidad. Por ejemplo, si vives en un pueblo con potencial turístico, cómo haces si las carreteras están destruidas, la gente se va a las ciudades y los temporadistas no llegan.

Muchos se desmoralizaron cuando nuestro presidente electo, Edmundo González, debió huir de Venezuela. Como dicen por ahí “no hay mal que por bien no venga”. Algunos piensan y hasta la misma María Corina Machado ya lo ha dicho, que la salida de Edmundo a España puede jugar a favor de la transición política en el país. No caigamos en el desánimo, mantengamos la esperanza y la confianza en quienes están liderando este proceso.

Bueno, esperemos que esta semana las cosas vayan mejor para todos, porque ya ni enfermarse puede uno, aunque por ahí hay iniciativas de los propios médicos para facilitar el acceso a las consultas.

Te dejo, por ahora, estamos pendientes. ¡Dios te bendiga!

¿Qué más está pasando?

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