No podemos dejarnos someter

Espero estés bien, aunque con estas cosas que pasan en Venezuela, donde el régimen y sus marramucias intenta robarnos la alegría y nuestros derechos, tú me dirás… pero no podemos dejarnos someter así como así. Noooo, que va, algo se nos tiene que ocurrir.

Nadie quiere seguir viviendo con calles rotas, que se nos vaya la vida en colas, sin servicios públicos eficientes, con los aparatos dañados por apagones. Una tortura, y lo peor es que a cada rato suben las tarifas del agua y la luz, pero son servicios que siempre están fallando.

Por cierto, tortura también es la que viven los familiares de los presos. Ahora intervinieron Puente Ayala, por allá en Barcelona. No se sabe nada del pran ni de los presos, por lo menos eso dijeron los familiares.

Y brincando de tema en tema, el mar está pasando factura. Unas 500 familias en Anzoátegui fueron afectadas, hubo un desastre en Río seco, por allá por Falcón. Y hay quienes piensan que lo del cambio climático es puro cuento, pero aquí tenemos las evidencias. Hay que cuidar más al planeta.

Me contó la prima Judith que la quincena se le fue en un respiro, por lo que le tocó rematar mercancía para pagar deudas, habrá que meterse a buhonero pero hasta ellos se las ven negras.

¿Viste que linda la celebración de nuestro beato José Gregorio Hernández? Ojalá nos hiciera el milagro y curara a este país que está muy enfermo.

Bueno, te dejo que voy a hacer la cola para la gasolina en un bomba internacional, porque si busco subsidiada, me tengo que mudar con chinchorro y todo para la estación de servicio, porque ahí puedo pasar días esperando por unos pocos litros de combustible.

¡Dios te cuide!